jueves, 12 de enero de 2012

Benedetti, sin desperdicio

...bastante amarga es la vida como para que, además, nos pongamos plañideros o mimosos o histéricos, solo porque algo se puso en nuestro camino y no nos deja proseguir nuestra excursión hacia la dicha, que a veces está al lado del desatino... (Del genial escritor Mario Benedetti,  LA TREGUA)

Cuando todo pasó, realmente yo me sentía hundida, confusa, perdida. La primera noche sentí que él había muerto cuando palpaba con mi mano el hueco de su cuerpo en nuestra cama.
Las semanas pasaron y alguien, otro sabio como Benedetti, me dijo: "Tú ahora no te das cuenta, pero la vida te ha dado una segunda oportunidad".
Pasaron los meses y pude comprobar que realmente es así.
La dicha, a veces, está al lado del desatino y ello es algo que solo podemos ver con posterioridad ¡ En cuantás ocasiones nos lamentamos de algo que estimamos una desgracia y luego damos gracias de que fuera así ! Otras nos arrepentimos de haber anhelado algo y nos viene a la cabeza aquello de "Cuidado con lo que deseas, tus sueños pueden hacerse realidad".
La vida realmente está llena de personas maravillosas; otras no. Las primeras están ahí, deseando ser descubiertas.




* Seguro que le da mucha verguenza por lo poco que le conozco, tan solo sus letras en sus paseos por el Turoparc, pero he de agradecerle al Sr. Paseante haberme descubierto a través de su blog a este Gran Escritor.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Sin duda alguna, este libro de Benedetti no tiene pérdida, como tampoco tienen pérdida sus poemas. Es lo que ocurre cuando un genio retrata la realidad tan certera y lúcidamente y ésta supera, con creces, la ficción.

¡Me encanta Norah Jones! Gracias por ponerlo, preciosa Dalt.

Besitos y buen día, de parte de este pececito viajero-enamorado-glotón (¡jajajaja!).

* ¡Psssssssst, secretito... (a voces)..., me alegro muchísimo de haberte "presentado" a mi querido vecino: al Sr. Paseante! Para mí, su Turó Parc, también fue el mejor hallazgo habido y por haber en el mundo blogoesférico!

PS dijo...

Vengo leyéndote desde el post anterior en silencio. Al principio no quise añadir nada más que no fuera que La Tregua es muy buena novela y que también a mi me marcó cuando la leí. Pensaba, entre mí, que es muy fácil juzgar a las personas. ¿Quién no lo ha hecho alguna vez en su vida? Pensaba también lo difícil que es vivir una experiencia como la que tu explicas, de un lado y del otro.Nada más.

Hoy, en este nuevo post veo una ventana abierta y me alegro. Después de todo es cierto que cuando se cierra una puerta pueden abrirse muchas ventanas.Deseo que así sea para tí.
un beso

Ada dijo...

Totalmente de acuerdo contigo. Y sí, genial Benedetti!

el paseante dijo...

Repito mi comentario en tu post anterior: si te quieres y te eres fiel a ti misma, lo demás importa poco. Y este planeta está repleto de personas excelentes (no hace falta perder el tiempo con las mediocres).

PD: Psssst, secretito: Ámber en realidad soy yo. He creado ese personaje para tirarme flores a mí mismo. Cosas de egocéntricos.