sábado, 20 de agosto de 2011

" Las chic@s de oro"

Esta tarde he ido a la playa con una amiga y un amigo muy queridos (por mí e imagino que por mucha más gente). La verdad es que era un día de perros para estar en la playa porque la bandera era roja y los de la Cruz Roja (valga la redundancia) no paraban de anunciar que el baño estaba totalmente prohibido a lo largo y ancho de todos los altavoces esparcidos por toda la costa. Bueno, los de la Cruz Roja no, la chica de la Cruz Roja, una chica con voz cabreada que nos gritaba como si fueramos niños en un patio de colegio ( no se parecía demasiado a las chicas de la Cruz Roja de aquella película española y es que, como diría mi abuela, las cosas ya no son como antes).

Por hacer algo especial, nos hemos dado el lujo de alquilar unas hamacas.

Allí estábamos, los tres bocarriba (esta semana quedaremos otro día para ponernos bocabajo y remediar el desastre de bronceado bicolor de hoy), como iba diciendo, los tres bocarriba derritiéndonos al sol.

Si bien dicen que el calor dificulta la concentración y el entendimiento, en este caso operó en mi amigo como un foco de luz "einsteniano". De pronto se incorporó y, sacándonos de nuestro sopor, nos propuso un plan de futuro para después de nuestra jubilación:

- ¡Seremos como "Las chic@s de oro! He pensado que cuando nos jubilemos, nos compremos entre los tres una casa de una sola planta en una isla maravillosa y contratemos a una chica para que nos cuide.

La propuesta iba completamente en serio.

No he podido remediarlo y he empezado a imaginarme a nosotros tres ya viejecitos. En principio, me ha resultado muy gracioso pero cuando regresaba a mi casa he hecho varias reflexiones:

1. Mi amigo piensa que en la vida ya no va a encontrar otra pareja y/o, si la encuentra, la dejará plantada por nuestro plan (¿?)

2. Esto es lo más parecido a una propuesta de matrimonio a largo plazo y eso me mosquea. No pienso volver a casarme.... aunque he de reconocer que sería halagador que alguien me lo propusiese, eso creo, bueno, también dependería del alguien, obviamente.

3. Debo de sentirme muy feliz de que otra persona piense en mí como una de sus compañeras de vejez ???

No sé, estoy hecha un lío.
Consultaré su propuesta con la almohada.

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Sorry Dalt, antes de leer el post yo en realidad he venido a proponerte ...

Ratita ratita (la presumida me refiero, la del cuento de nuestra infancia) : TE QUIERES CASAR CONMIGO??.

Es que dicen que a la tercera (en mi caso) va la suicida.
;-)





Un beso, dulzura.

Daltvila dijo...

Bueno, bueno, bueno....

Uhmmmmm!!!!

Como decírtelo:

Como ya sabías de antemano mi respuesta, no te dolerá que te diga que "NO" sin tan siquiera preguntarte aquello de: " ¿Y por la noche qué harás?" (¡Qué fuerte! por cierto, nunca me había parado a pensar)

Ruta de la Seda dijo...

Me opongo a que no te vuelvas a casar. Adoro las bodas.
Fíjate hasta que punto que si me casara ahora sería la cuarta vez.
Es mucho mejor la boda que el hecho de que te lo pidan. Te puedes casar sin su permiso, basta montar un fiestón y llenarte la cabeza de flores, alquilar a actor que haga de cura,como hice yo, y decirles a todos tus amigos que compren arroz "La Fallera".
Yo quisiera verte de blanco, de esos que cancelan pasados y te devuelven a los 20 años.
Y llevaría palomas mensajeras que lanzar al aire cuando con una sonrisa asustada cruces el umbral de una puerta sólo de ida.
Además adoro las mantillas, las tías que ni conoces y el despropósito que supone concentrar a gente tan diferente intentando aunarlos en un sentimiento.
Adoro a los borrachos que bailan tango mientras que se arrastran al baño, y a las solteronas que miran si el ramo les caerá en la cabeza.
Adoro la torta y los ligeros, adoro necesitar a tres amigas para que levanten un cancán y poder hacer pipí después de horas de contenerlo.
Y por encima de todo adoro la posibilidad!
Tu di que sí, sin miramientos.... que después en tres días estás divorciada y a empezar de cero!
Y que venga alguien a quitarte lo bailaoooo!

Daltvila dijo...

Anuar:

Gracias por tus bellas palabras, son de esas palabras que te elevan el ánimo. Me he colado en tu morada internauta y he comprobado que no es sino un aperitivo de tu penúltimo escrito.

* Tengo la curiosidad de saber cómo me encontraste.

Daltvila dijo...

Ruta de la Seda:

Si eso sucediera, no dudes que serías una de mis damas de honor ayudándome todo el día con el vestido, pero ese es un supuesto muy improbable, salvo que caiga bajo los efectos de alguna pócima.

Besos

Daltvila dijo...

Ruta de la Seda:

Si eso sucediera, no dudes que serías una de mis damas de honor ayudándome todo el día con el vestido, pero ese es un supuesto muy improbable, salvo que caiga bajo los efectos de alguna pócima.

Besos

Espera a la primavera, B... dijo...

¡Qué gran serie! Ahora sólo os queda decidir quién hace de Sophia.

Daltvila dijo...

Espera a la primavera, B...

Tendremos que hacer un casting para nuestra Sophia, sin duda, la mejor.

Ya podrían volver a poner la serie en Divinity y dejarse de tanto Sexo en Nueva York.

Espera a la primavera, B... dijo...

Dí que sí, ya está bien de glamour y gente fantástica. El principal problema del mundo es que nos gobiernan gentes como la de sexo en nueva york cuando nos deberían gobernar gente como las chicas de oro.

Yo propongo un comité de sabios que elimine el glamour casposo de la televisión.

Más Arguiñano y menos sex in the city.

Juan Ignacio dijo...

Mi antigua vecina del piso de abajo lo hizo, tres amigos se compraron un apartamento cada uno en la costa para cuando se jubilaran y aún les faltaban unos 30 años para hacerlo. No sé si seguirán en la idea, pero siguen siendo amigos. Después de toda una mañana tumbado al sol es una idea que te puede surgir.

Para mí sería un halago que alguien se quisiera casar conmigo(si es una mujer mejor), siempre y cuando no me lo tuviera que repetir.

Feliz semana.

Daltvila dijo...

Cómo q repetir?
Me está encantando q comentes mis viejas entradas. Es como volver a leer un viejo diario. Qué deprisa ha pasado el tiempo!
Feliz semana también para ti Juan Ignacio

Juan Ignacio dijo...

Quería decir que si la chica en cuestión me tuviera que repetir la pregunta no me gustaría porque está claro que la primera vez le habría dicho que no, si hubiese sido al contrario no le quedarían dudas ;)

Un beso.